A través del tiempo muchas historias de angustia han permanecido ocultas. Cuando la semilla podrida se manifiesta, una de estas historias al fin se cuenta. Dos mil años transcurren desde que ascendió y al regresar, la sociedad no reconoció la redención. Percibido como un vagabundo, derrotado y con sus creencias destruidas. Su existencia divina negada.